ayer mi psicóloga me hizo una pregunta que abarco gran parte de mi día, ¿ Que serias si volvés a nacer? mi respuesta al instante fue, seria mas calmo, pero, pensándolo bien y después de varios minutos de pensarlo llegué a la conclusión de que sería como se van dando las cosas (o no es eso lo que somos ahora? ) , a ver, lo que trato de explicar es que sería vulgarmente "lo que venga" , creo que tengo una mente muy abierta y acepto todo lo que viene, y descubrí que esa pregunta en vez de ser un ¿que serías? es mas un ¿que sos ahora?, y con respecto a eso, nunca quise ser un estereotipo de persona, siempre quise ser distinto (tal vez es eso lo que busco), siempre quise sentirme reconocido con las cosas que me gustan, y siempre tuve gran capacidad para elegir. Como toda persona tengo un lado oscuro, o malo, no , no me atrevo a llamarlo malo. (no soy yo quien dice lo que es malo o es bueno) ese lado oscuro esta un poco escondido para algunas personas pero hay otras que lo conocen totalmente, y si me pongo a pensar que factores hacen que hoy sea así sin duda tengo que nombrar a mas de media centena de personas, 50000 palabras, e infinitas acciones pero creo que hay cosas mas marcadas, cosas que te hacen ser como sos, y ahi es cuando es cuando empiezo a llegar siempre al mismo punto (aclaro que son dos palabras que estan prohibidas nombrar por mi boca) a vos. Y es ahi cuando me pregunto por que tengo esa necesidad de martilizar mi cabeza pensando en vos, creo que logro asimilarte en cada pensamiento y siempre terminas siendo mi tema de conversación, pero ¿ que es lo que estamos haciendo? mi inmadurez en ese sentido es muy amplia, creo que demasiado,y si, lo acepto en estos ultimos meses lograste en mi lo que nadie logro, pero nunca me terminan de cerrar las cosas, como tu forma de convencerme para lo que sea, o tu facilidad para hacerme reir, o tus ganas, tus ganas de vernos y que todo lo demas no exista, pero ahora solo puedo hablar en tiempo pasado, yo no elegi que las cosas sean así y vos tampoco pero llego a la conclusión (una vez mas) de que los días sin vos definitivamente duelen.